CRONICA DE UNA DESPEDIDA ANUNCIADA

I

Esta no es una carta, ni menos una declaración, tampoco un comunicado de las frustraciones, sino solo son palabras que tratarán de delimitar una situación, una idea, en fin, no quiero más moldes periodisticos, ni literarios, me despido de ellos, de todo lo que comprendí y conocí...
sabemos que todo es efímero, pero no tan efímero, como ahora estoy asimilando que es, y será como un corte de cordon umbilical inesperado, doloroso, sin sentido, pero tendrá que ser así indiscutiblemente.

II

Han dado fecha para mi salida de las masmorras, tan dado la fecha para volar mi cabeza, miles pisarán mis pies, y sabré lo que es la deploración, me sentiré vil y solo un ignorado, en fin me undiré en este cuerpo, para más no volver a reflotar, porque una parte de mí se está destruyendo, y la otra sigue enterrada bajo tierra.

III